viernes, 9 de noviembre de 2018

CONDUCIÉNDONOS 


Te he regalado mas vidas de las que tenía, y aún así las cambiaste por otras de nueva generación. Claro, coleccionas vidas y yo sin saber que era una de las antiguas.

Has circulado sin cederme el paso, y luego te das a la fuga. Te has salado todos los carteles dirección a mi, y luego dices por ahí que te has perdido. No puedes circular con prisa hacia un sitio en el que tienes que ir despacio. Quizás eso fue lo que pasó. Los stops están para el punto muerto y no para meter quinta. Por no hablar de la dirección prohibida, la cual eran todas las salidas. 


Eramos una especie de dirección contraria en la que el cambio era del amor a la amistad. Y eso es más triste que un accidente de tráfico por tu cuerpo. Ahora sin carnet no podemos conducirnos, y no lo hagas que ya sabemos de sobra que la vida nos multa. 



UN LUGAR LLAMADO MUNDO


Hoy escribo todo aquello que he enmudecido, aquello que me han obligado a callar. Hoy reivindico lo que quiero, lo que necesito. Nuestra libertad. Día a día vivimos en un mundo opresor que nos obliga a acatar normas que no queremos, leyes contraproducentes que ayudan al rico y oprimen al pobre.Vivimos en un mundo machista en el que importa mas la ropa que el acto, un mundo racista en el que se impone el color antes que el talento, un lugar homófobo en el que se te juzga por amar. Donde dejan morir a gente de hambre cuando ellos tienen millones en la cuenta, donde dejan robar al rico y juzgan al pobre. Habitamos una sociedad retrógrada en la que las reivindicaciones se solventan con violencia por miedo a que surjan efecto. Solo pido un lugar donde puedas opinar sin miedo, amar sin temor y caminar por la calle tranquila. No pido una sociedad perfecta, solo justa.